Cuando la hostelería portugaluja tenía una gran importancia dentro del mundo empresarial jarrillero y en los locales se podía fumar, la mayor parte de los dueños de bares, clubs o restaurantes, publicitaban sus locales regalando cajas de cerillas a sus clientes más habituales.
Esta práctica publicitaria ha tenido un gran éxito durante décadas, llegando a ser motivo de colección por parte de aficionados dispuestos a conservar esta peculiar imagen de muchos locales hosteleros portugalujos.
Las cajetillas recogían en sus portadas logotipos de los locales, imágenes alegóricas a los mismos y hasta fotografías de sus propietarios, algunos de ellos reconocidos personajes del mundillo portugalujo.
En esta entrada inserto una pequeña muestra de esas cajas, algunos de los locales todavía existen, otros han cambiado de nombre y otros han desaparecido. Cabe citar también el cambio del nombre de las calles en las que se ubicaban, figurando en ellas nomenclaturas de tiempos pasados.
Espero que la entrada guste y hasta la próxima.
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